Y caminar por las calles de San Francisco con flores en el pelo. Mirar a la gente con sonrisas en los labios y amar a la humanidad.
Quise ver energías positivas, paz a mi alrededor, bailar todo el día sin hacerle daño a nadie. Pertenecer en cuerpo y alma a una generación que iba a cambiar el mundo sólo con música.
Intenté generar buenas vibraciones, sentirlas en lo más profundo de mi ser. Vivir de ilusiones, de ideales, con la gente conocida o no, como hermanos.
Llevaba el pelo largo, las botas camperas, las faldas de flores, camisa blanca de largo cuello... los ojos llenos de alegría.
Quise ver al mundo en movimiento, todos a una, en pro de amar a nuestra Madre Tierra, de buscar nuestra felicidad en lo sencillo, en las flores del campo, en las notas de la primavera eterna. Pretendí un amor eterno, romántico, libre... que me permitiera reir, llorar, bailar, emocionarme, VIVIR.
Me enganchaba de noche a la radio para escuchar baladas que llegaban al alma y encendían mi imaginación, o para vibrar con guitarras eléctricas que me desgarraban por dentro y me hacían ascender a otros planos astrales... o qué sé yo.
Yo quería que todo el mundo fuese bueno, que todo fuese bonito, que las flores de mi falda ascendiesen a mi cabello, al viento, y lo inundasen todo de luz.
Y al final... me hice mayor.
Ahora, después de varias décadas, parece ser que vuelvo a las andadas: sigo queriendo ser una hippie. De corazón.
Quise ver energías positivas, paz a mi alrededor, bailar todo el día sin hacerle daño a nadie. Pertenecer en cuerpo y alma a una generación que iba a cambiar el mundo sólo con música.
Intenté generar buenas vibraciones, sentirlas en lo más profundo de mi ser. Vivir de ilusiones, de ideales, con la gente conocida o no, como hermanos.
Llevaba el pelo largo, las botas camperas, las faldas de flores, camisa blanca de largo cuello... los ojos llenos de alegría.
Quise ver al mundo en movimiento, todos a una, en pro de amar a nuestra Madre Tierra, de buscar nuestra felicidad en lo sencillo, en las flores del campo, en las notas de la primavera eterna. Pretendí un amor eterno, romántico, libre... que me permitiera reir, llorar, bailar, emocionarme, VIVIR.
Me enganchaba de noche a la radio para escuchar baladas que llegaban al alma y encendían mi imaginación, o para vibrar con guitarras eléctricas que me desgarraban por dentro y me hacían ascender a otros planos astrales... o qué sé yo.
Yo quería que todo el mundo fuese bueno, que todo fuese bonito, que las flores de mi falda ascendiesen a mi cabello, al viento, y lo inundasen todo de luz.
Y al final... me hice mayor.
Ahora, después de varias décadas, parece ser que vuelvo a las andadas: sigo queriendo ser una hippie. De corazón.
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Ehhhh aún estás a tiempo !!! Yo, por ejemplo, el pelo largo ya no me lo puedo dejar :)
Un beso!!!
Je. Me hiciste volver a un buen tiempo sobre todo muy bonito y muy feliz.
Aun me queda algun rizo pero menos.....
Una buena filosofía la de los hippies. No me extraña que quieras volver. Gracias por tus palabras. Abrazos
A mi tambien me gustaría volver a ser hippies .
Que tiempo más feliz , quizas no tanto por ser hippies sino porque eramos muy jovenes y ilusionados ( o ilusos ! )
Besos desde Málaga.
Hola!!!! Una entrañable y nostálgica entrada!!!! BESITOS Y SALUDITOS
Ella está preocupada por lo del Amazonas, rebelada con toda la sociedad, ya lo ves, completamente loca.
Como dice la canción de Alejandro Sanz de allá por los 90.
Cuando éramos más jóvenes y más tontos.
Nunca dejamos de ser lo que somos en esencia. Y lo sabes.
Abrazos, hermosa
amor sí, guerra no. lástima que un postulado tan idóneo no tenga cabida en este mezquino mundo! contribuyamos a mejorarlo, aunque sea desde la insignificancia de nuestros corazones.
Que bien lo relatas!!!
Me identifico con todo lo que dices, yo tambien quise ser hippy, era mui época, todos queriamos hacer el amor y no la guerra...
Sigo queriendo...pero estamos en un mundo que no creo que nos deje...
besinos
Ehhhh. ¡Ja,ja,ja! Imagino a las flores de la falda trepando por tu cuerpo para agarrarse a tu cabello.
Es muy buena política, pero siempre hay que saber con quien. Oye, algo fácil. Hay ganchos de pelo muy bonitos, con florecitas de cristalitos que brillan. Yo tengo en transparente y en lila. Y luego estrellitas también. Que a una le va también ese rollo.
Y lo de hacer el bien, si pero con quien no se ría de una...
Besitos, guapa
Y los pantalones de campana y el pelo largo, que es otra de las fotos que tengo por ahí. Buenos recuerdos, amiga. Buenos tiempos también son ahora y por eso me parece una gran idea que sigas teniendo un corazón alegre y ganas de vivir la Naturaleza, la música y los sueños.
Una hippie de corazón, como dices.
Un besote fuerte, amiga.
De corazón, alma y espíritu.
Estoy convencida de que muchos de esos ideales no son erróneos y también de que nunca es tarde para volver a intentarlo. Adelante....
Un beso, amiga.
Pienso que siempre has sido y serás una hippie en esencia.
Sin la parafernaria y la estética caduca y que de vez en cuando reinventan para las pasarelas.
Tú estás cambiando el mundo, dentro de tus posibilidades.
Ojalá todos aportaran ese granito de arena tan necesario.
Un besazo con una sonrisa feliz.
Cuídate mi querida Isabel.
Thot, no te preocupes, el pelo no hace al hippi (pero le ayuda, jaja).
Tony, volvemos allí cuando queremos, pertenecemos a ello.
Ligia, pese a todo siempre han tenido un fondo muy noble que ha comulgado con mis propias ideas.
Annik, mejor ilusionados que ilusos... siempre seremos jóvenes en el corazón.
Liova, encantada de tenerte por casa, vuelve cuando quieras.
Larisa, yo no creo que fuésemos más tontos... teníamos otra fe en la vida, que parece que se pierde con el tiempo... o no ;)))
Raúl, es uno de esos postulados idealistas utópicos que todos querríamos que se hiciesen realidad.
Pluvisca, tienes razón en que el mundo no nos deja, pero algo habrá que hacer...
Pili, tienes razón con lo de las pinzas de pelo con flores... el verano que viene me compro!!!
Besos a todos.
Los deseos no satisfechos vuelven a visitarnos. Llaman insistentes a nuestra puerta y exigen que los dejemos entrar.
Un beso.
Creo que todos en algún momento deseamos descomprimirnos y liberarnos de las ataduras impuestas.
No es loco lo que te pasó y siempre se puede elegir volver.
Besos.
Tod@s o casi tod@s , envejecimos de golpe, sin apenas tener tiempo de vivir nuestros sueños...
Un beso Isabel.
Bueno, pues yo pienso que ningún tiempo fue mejor.
La ecuacióin "lo que pudo haber sido y no fué" es imposible.
Nosotros somos el resultado de nuestro pasado y del presente.
Pero lo único que podemos vivir es el presente y el futuro. Y los ideales siempre pueden vivir con nosotros.
Así que... en marcha!!!!!
Muchos besitos
jajajaja pero has dejado de serlo alguna vez? paz y amor preciosa
Nunca es tarde para regresar......y yo espero k asi sea porque confio en algun día volver a eso....buena vida!